La mayoría de las personas que buscan una solución rápida para el problema del sobrepeso y la obesidad, caen en manos de personas que la mayor parte de las ocasiones les ofrecen soluciones mágicas, tradicionales, sin sustento científico alguno.
Las llamadas dietas rápidas, de emergencia, del ayuno intermitente, de la manzana, de la toronja, de las grasas, del café, del agua, etcétera, etcétera, no son más que alternativas a una posible solución inmediata a un problema que la mayor parte de las veces lleva tiempo presente en nosotros.
Un cambio real en nuestros hábitos de alimentación y una practica regular de actividad física, son la alternativa real en el corto, mediano y largo plazo. Es por ello que más que hacer una dieta, lo que debemos entender es que un estilo de vida activo y saludable es lo que mas nos conviene.
Si nos damos la oportunidad de visitar a un profesional del área de las salud, nos hará una valoración acorde a nuestras necesidades reales, además de una orientación correcta sobre los cambios que debemos incluir en nuestro día a día.
Demos una oportunidad a los profesionales de la salud por encima de vendedores y charlatanes que lucran con nuestra necesidad.